El título le fue otorgado a la cantante pop por la gente, los fanáticos del pop.
La suerte de certamen fue organizado por la revista Billboard, el magazine incitó a sus lectores, mediante una votación, a seleccionar las cantantes más sexy.
Lo que extrañó a muchos es que fuera la más votada a pesar de los recientes tropiezos en su carrera, ya que mientras que a Britney se la veía en escenas embarazosas, sus competidoras tenían sus carreras en pleno período de expansión, como la morocha Beyoncé, entre otras, o la rubia Christina Aguilera.
Britney se consagró como la intérprete más sexy, con el 27% de los votos, mientras que Beyoncé obtuvo el segundo puesto con el 13%, y la reciente estrella de la canción, Miley Cyrus en tercera ubicación con el 9%, detrás de ellas Rihanna y Lady Gaga con el 8 y 7% respectivamente.